Conquistar las manos de la felicidad en Persona 4 Golden: una guía
Happiness Hands son enemigos formidables en Persona 4 Golden, aparecen aleatoriamente en mazmorras y representan un desafío importante, especialmente al principio del juego. A pesar de su dificultad, derrotarlos genera importantes recompensas de XP, lo que hace que el esfuerzo valga la pena. Esta guía se centra en superar Happiness Hands en el Castillo de Yukiko.
Debilidades y estrategias de la mano de la felicidad
Happiness Hands exhibe una fuerte resistencia a los ataques elementales. La clave para derrotarlos radica en explotar su vulnerabilidad al daño físico. Si bien los ataques del Todopoderoso son efectivos contra Golden Hands más adelante en el juego, esta no es una opción al principio. Las Manos de la Felicidad infligen un daño mínimo e incluso pueden saltarse turnos, pero huirán si se les da la oportunidad. Una explotación de debilidad o un golpe crítico desencadenarán su escape. Priorice apuntar a una sola Mano de la Felicidad si aparecen varias; Derribar incluso uno es un logro significativo en esta etapa.
Persona y tácticas esenciales
La estrategia más efectiva consiste en fusionar Orobas, una Persona que posee la habilidad Bofetada histérica. La capacidad de doble golpe de esta habilidad y la posibilidad de infligir ira son cruciales. Una Mano de Felicidad Furiosa utilizará continuamente su ataque básico, impidiendo su escape. Orobas se puede fusionar usando:
- Apsaras Forneus
- Limo Apsaras
Antes de participar, asegúrese de que su grupo esté completamente curado. Concéntrate únicamente en ataques físicos que consuman HP, evitando cualquier otra acción. Utilice lo siguiente:
- Yosuke: Puño Sónico
- Chie: Rompe Calaveras
- Protagonista:Bofetada Histérica
Repite este ciclo de ataque hasta la victoria. El éxito depende en gran medida de la suerte debido a las limitaciones del juego temprano. Sin embargo, derrotar incluso a una Mano de la Felicidad proporciona importantes ganancias de experiencia.
Nota crucial: Evite usar un ataque total a menos que esté seguro de matar; de lo contrario, la Mano de la Felicidad revivirá y huirá.